Efectivos de distintas comisarías de Quilmes tuvieron que intervenir este lunes para frenar los desbordes generados por grupos de estudiantes que celebraban el fin del ciclo secundario, en una jornada que terminó con disturbios y daños en varios puntos del distrito.
En pleno centro de Quilmes, especialmente en la peatonal Rivadavia, los jóvenes provocaron destrozos en las pérgolas, rompieron mobiliario urbano e incluso incendiaron cestos de basura.
La situación escaló rápidamente: lo que comenzó como un “banderazo” con cánticos y bailes terminó en episodios de violencia que llevaron a numerosos comerciantes a llamar a la Policía para pedir asistencia.
Un escenario similar se vivió en San Francisco Solano, donde estudiantes —y también otros grupos que se sumaron a los desmanes— ocasionaron daños en el Parque Lineal y en calles cercanas, donde destruyeron cestos de residuos y otros elementos públicos a su paso.
En el centro de Quilmes, la intervención policial logró contener los disturbios y evitar que la situación se agravara. En Solano, en cambio, la respuesta de las fuerzas de seguridad llegó con demora, aunque finalmente no se registraron incidentes de mayor gravedad.
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